En San Antón, calabazas al sol.
Desde San Antón, una hora más de sol.
En San Antón dijo el gallo a la gallina pon.
Al pasar San Antón, sastres al sol
En llegando San Antón, ninguna niebla llega a las dos
y hoy celebra el santoral católico su festividad
LEYENDA
San Antón Abad(Antonio), nació en el pueblo de Comas, en el año 251, cerca de Heraclea, en el Alto Egipto. Se cuenta que alrededor de los veinte años de edad vendió todas sus posesiones, entregó el dinero a los pobres y se retiró a vivir en una comunidad local haciendo vida mística, durmiendo en un sepulcro vacío. Pasó muchos años ayudando a otros ermitaños a dirigir su vida espiritual en el desierto, más tarde se fue internando mucho más en el desierto, para vivir en absoluta soledad.
También se cuenta que en una ocasión se le acercó una jabalina en actitud de súplica con sus jabatos, que estaban ciegos. Antonio curó la ceguera de los animales y desde entonces la madre no se separó de él y le defendió de cualquier alimaña que se acercara.
FIESTAS
En la festividad de San Anton, se celebra en algunas localidades de la Alpujarra, y de la Vega Granaina "los chiscos", que son hogueras alrededor de las cuales se baila, se come y se charla amigablemente, uniendo a todos los vecinos y los que llegan de otros pueblos. Antiguamente se rifaba el cerdo que durante el año había sido engordado entre todos los vecinos.
Antaño era costumbre que los niños y los no tan niños cantaran canciones típicas de esta festividad mientras jugaban a la rueda alrededor de la hoguera. A modo de ejemplo se incluye la siguiente letra:
San Antón mató un marrano
y no me dio las morcillas
quien le diera a San Antón
con un palo en las costillas.
Y no puedo terminar sin escribir el adagio: Cuanto mas conozco a los animales racionales, mas quiero a mi perro.
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