Hemos recibido tu carta, eso sí, en la ultima valija.
Lo que nos pides en ella para todos los seres humanos, sensatez, nosotros no la podemos donar, ya que todo ser humano nace con ella, y sois vosotros los que estáis obligados a usarla, pero la necedad, unida a la ignorancia y a la soberbia de algunos seres humanos, hacen llevar al mundo a situaciones peligrosas.
Te dejamos lo que en la segunda mitad del siglo XVIII, escribió Tomás de Iriarte.
Con toda ilusión le pedimos al Niño Dios que os otorgue a todos los seres humanos la fuerza suficiente para desterrar la soberbia la ignorancia la insensatez, claro que Él ya os lo dijo: amaos los unos a los otros como a vosotros mismos, no hay mejor antídoto que el amor de verdad, para alejar cualquier miseria.
Feliz año te deseamos
Melchor Gaspar y Baltasar.
EL BURRO FLAUTISTA
(Sin reglas del arte, el que en algo acierta,
acierta por casualidad)
Esta fabulilla,
salga bien o mal
me ha ocurrido ahora
por casualidad.
Cerca de unos prados
que hay en mi lugar,
pasaba un borrico
por casualidad.
Una flauta en ellos
halló, que un zagal
se dejó olvidada
por casualidad
Acercóse a olerla
el dicho animal,
y dio un resoplido
por casualidad.
En la flauta el aire
se hubo de colar,
y sonó la flauta
por casualidad
“¡Oh!” dijo el borrico;
“¡que bien sé tocar!
¡Y dirán que es mala
la música asnal!”
Sin reglas de arte,
borriquitos hay
que una vez aciertan
por casualidad.
¡¡cavilemos!!: la moraleja que los Reyes Magos quieren decirnos, es que el ser humano en su soberbia, nunca acepta que fue por casualidad, y de este modo, y no es por casualidad, nos llenan de miserias a los que no por casualidad, confiamos haran las cosas, no por casualidad.
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