EN LA PRIMERA CASILLA

A las 7 horas 32 minutos, (6,32 hora solar,) decidí saltar de la cama y ponerme a escribir. Se lo que quiero escribir, pero de momento no se como hacerlo. Ordenare un poco las ideas, y para empezar a ordenar, voy a reunir todo lo que hasta ahora escrito, en una etiqueta muy especial que recoja todas aquello que ya escribí, sobre lo que quiero escribir.
¿Y como titularé este grupo de entradas?
No lo dudo más, la titularé

NOSOTROS,

es la mejor, y fantasearé una acepción inconfundible, para definir lo que para mí significa.
¿Y por qué de todo este preámbulo?
Porque en esta semana tan especial, y para que aún se más especial, ayer, no es que parezca que fue ayer, es que fue ayer, justo ese día que el número del segundo, bueno que fue ayer, dio comienzo lo que pretendo a alguien muy especial relatar.

“Para que tú desde ayer,
sin aun conocerte, ya te deseemos,
tuvieron que acontecer mil
y una cosas que poco a poco te contaré.
La primera y más importante es que tus padres
con esperanza te engendraron,
y cuando estaban dándonos tan feliz nueva
me vino la imagen de un tablero de ajedrez,¿?
Tú estabas en la primera casilla
tu madre y tu padre en la segunda
en la tercera había cuatro personas
dos abuelas y dos abuelos
Y así hasta la casilla sesenta y cuatro
¿Cuántos predecesores hay en esa casilla?
Muchos, papá que es más matemático que yo
te dirá cuantos son, pero acompañará,
con toda seguridad, ¡no, eso no es así!.
Pues fuera como fuere, muchos
han pedido que tú ya estés aquí,
y con gran ilusión esperamos
el momento que en nuestros brazos
podamos con ternura tenerte”.