Es corto, y quizás alguien ya te lo han contado, pero tiene para mi un gran recuerdo que quiero tu sepas, y algo de secreto que te pido guardes, ¨pues fue el papá del padre de tú papa, sí tu bisabuelo, quien a tu abuelo y a mí, nos lo contó, y de este modo nos enseñó que hay muchas palabras, que aunque no lo parezcan, “mágicas son”.
Erase ya hace mucho tiempo, un niño, parecido a ti, que paseaba por un prado, en el centro había un gran árbol de altas ramas, donde cientos de pajaros vivían.En ese árbol había colgado un cartel que decía: soy un árbol encantado, si dices las palabras mágicas, lo verás.
El niño pensó, -no puede ser verdad, pero por intentarlo- así que trató de acertar el hechizo, y probó con abracadabra, supercalifragilisticoespialidoso, tan-ta-ta-chán, y muchas otras, pero nada, ocurria que hiciera ver que aquel era un árbol encantado.
Rendido, unió sus manos con gesto de oración y con voz suplicante le dijo: "¡¡por favor, arbolito!!", y entonces, se abrió una gran puerta en el árbol.
Todo estaba oscuro, menos un cartel que decía: "sigue haciendo magia".
Entonces el niño dijo: "¡¡Gracias, arbolito!!". y se encendió dentro del árbol una luz que alumbraba un camino hacia una gran montaña de juguetes y chocolate.
El niño pudo llevar a todos sus amigos a aquel árbol y tener la mejor fiesta del mundo.
Por eso se dice siempre que "por favor" y "gracias", son las palabras mágicas.
Y colorín colorado este cuento se acabado
Con todo el cariño del hermano de tu abuelo (si le preguntas a papá cual es mi nombre seguro que te contestará; tiene el mismo nombre que tenia tu bisabuelo), te deseo un feliz y maravilloso cumpleaños.
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