He dudado, sí, he dudado, si hoy uno de enero 2010 lo que deseo escribir lo he de escribir.
He dudado, si, he dudado, porque considero que hoy no es día de decir lo que mis emociones escribir, desean escribir.
Debo pensar que la vida en definitiva es del color del cristal coque se mire, pero también ¿cuantas veces nos equivocamos por temor a equivocarnos?, ¿cuantas veces los silencios producen mas dolor que las voces?
Hoy estaba viendo el concierto de primero de año, el presentador del programa, repitió, no sé cuantas veces que, tve ha partir de hoy no tendría publicidad. Intenté concentrarme en la música, pero por mas que lo pretendía, no pude remediarlo, la tristeza que los rostros de las personas que ayer vi en la calle, los gritos de hombres y mujeres, pidiendo algo para comer, me situaron a una triste y oscura realidad, estamos viviendo los peores momentos de los que yo recuerdo.
No lo he podido remediar, me han resonado los titulares de los periódicos de ayer: “He sacado adelante mi proyecto pese a la crisis”, con esas palabras nuestro ególatra presidente señor Rodríguez, resumió la gestión de su gobierno. Y me pregunto ¿cual es ese proyecto que ha sacado adelante?,
Haber conseguido que cuatro millones de personas vivan en la penuria de no tener trabajo.
Haber creado una ley donde la mujer y el no nacido, se encuentren tristemente indefensos ante una sociedad carente de amor.
O haber impuesto la tristeza que el laicismo conlleva, y que en esta Navidad todos la hemos vivido. Porque la perdida de los valores morales, y de unas sencillas normas de respeto a los demás, envuelven a las personas en unas extrañas tinieblas.
Porque nuestro presidente, y aunque él no lo sabe es el presidente de todos los españoles, y sus fieles seguidores, han confundido derecho de la libertad religiosa de las personas, con que ninguna confesión tendrá carácter estatal.
Una vez mas nuestra Constitución, en este caso en su articulo 16, se ve agraviada por unos gobernantes, que creen que gobernar es improvisar, al margen de la Constitución.
Sí he dudado en expresar la tristeza que en este primer día del año 2010, he sentido, ante la pobreza espiritual y material, que un torpe hombre ha sumido a nuestra España.
Pero como todo se ve según el cristal con que se mire, me quitare este cristal gris y lo cambiaré por el mejor cristal del optimismo, para mirar el año que hoy se inicia.
He dudado, sí, he dudado si es acertado expresar hoy uno de enero 2010, lo que he expresado.
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