jueves, 16 de febrero de 2012

LIGUERO, TRASANTEAYER Y HOY

A la par que buscaba un nuevo fondo para el blog, estuve blogueando, visité varios blog, y valoré que a este tengo que darle un “lavaillo” de cara, y me voy a poner manos a la obra, así que poco a poco iré cambiando, para que sin perder su veteranía ni su escuela, parezca que es nuevo.
Porque claro, las modas cambian, y si no que se lo digan al "liguero", que
¡hay que ver lo que era trasanteayer y lo que es hoy!, 
y a Paris Hilton, que parece que cada mañana, o por la tarde, es decir cuando se levanta, piensa en una nueva peculiaridad. Y para muestra basta un botón;
Nuestras abuelas llevaban incorporaron a los ceñidos corsé, una especie de tirantes que llamaron ligueros, como prenda que ayudaba a la comodidad de vestir púdicamente, y para que la imaginación del hombre hiciera sus propias cábalas.
Nuestras madres, aconsejadas por sus madres, desistieron del corsé, pero la medias había que sujetarlas, y así nació el liguero, prenda que incitaba a la “libídine” de los hombres que deseaban verla puesta, y ansiaban quitarla, pues solo sabían de su existencia, por lo que decía el diccionario de la Legua Española, “Especie de cinturón o faja estrecha a la que se sujeta el extremo superior de las ligas de las mujeres." (2ª acepción)
Y nuestras cónyuges, el liguero no usaron, porque la prenda tenia dos peculiaridades, práctica parece ser que no era, y sobre todo era, y creo que sigue siendo, dispendiosa. De ahí, que entre lo que nuestros abuelos imaginaron, y lo que nuestros padres pretendieron, influyó de tal modo en nuestros genes, que convertimos al liguero en un preciado fetiche sensual, que ella no adquiría y nosotros no nos atrevíamos a regalárselo, por si acaso. . . . ., terminábamos durmiendo, en el mejor de los casos, en el sofá.
Y así hemos llegado al día de hoy, las féminas han convertido a tan sensual prenda en una atractivo complemento adorno, 
sacándolo 
de debajo de tupidas y pesadas enaguas, 
y de los cajones de armarios donde se guardaban púdicamente,
a la luz del sol,
 
y a los destellos de los paparazzi

¡¡cavilemos!!
Habrá perdido el liguero su fetichismo, o habrá incrementado su fantasía sensual, y picarona. Posiblemente nuestros hijos tienen la conclusión.

enlaces:
metodos de seducción: el liguero
wolfordshop
la perla
como-ponerse-un-liguero
20minutos.es

1 comentario:

Anónimo dijo...

Muy interesante este articulo !! Por cierto, si vuestras "conyuges" no usaban liguero, no creo que fuese por lo que dices...