Dice la noticia que para cumplir con la Ley de Memoria Histórica, la Diputación Alcarreña solo rehabilitara las iglesias que no tengan restos del franquismo, por lo tanto el Obispado Sigüenza-Guadalajara, tendrá que retirar las placas o símbolos vinculados con la historia de España vivida durante treinta y nueve años, y que para bien o mal hace treinta y cuatro que terminó.Si el motivo u objeto de la Ley de Memoria Histórica consiste en destruir y borrar de los libros de historia y de las propias piedras lo acaecido entre los años 1936 a 1975, y no de rehabilitar aquellas personas y hechos que en su momento fueron ofendidos, fueran del lado que fuera y del pensamiento que fueran, entonces esta ley lo que nos hace es volver a las dos españas. (o aún peor a los 17,4 reinos de taifas)
¡¡cavilemos!!, seguro que más de uno no estará de acuerdo con el titular del periódico, y seguro que esos consideran que debía decir : "La Diputación condiciona las ayudas a que se cumpla la Ley". Aunque considero que el titular autentico que los señores de la diputación han pensado es: "Los que quieran conservar el patrimonio de España, tienen que pasar por mi aro"
imagen: iglesia del Apóstol Santiago de Solanillos del Extremo-Guadalajara.
fuente: pueblos de españa
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