No pretendo copiar, aunque así lo parece, es sencillamente dejar en mi blog, la reseña que en la prensa digital sobre el día de La Hispanidad del año 2023 que mas me agrado.
Pido disculpas a quien este "copia y pega no le parezca bien", voy para mayor
¡Leonor, guapa!
© Proporcionado por eldiario.es
Este jueves 12 de octubre hemos
asistido al debut triunfal de la princesa Leonor en el desfile del Día de la
Hispanidad. La princesa de Asturias lo ha hecho a lo grande, acaparando toda la
atención, convirtiéndose en la estrella del acto. Imponente en su uniforme
militar, ha sido uno de los grandes atractivos del acto, recibida con vítores y
aplausos.
La futura reina de España, que está
viviendo su mes más crucial, se ha mostrado en todo momento muy segura, ha
ejecutado el protocolo a la perfección. Ha cumplido con todas las
expectativas, ha dado un paso al frente en su camino hacia el Trono, y
demostrado que está más que preparada para ser la futura reina. Su presencia
junto al rey, vestidos ambos con uniforme militar, representa el presente y el
futuro de la monarquía española.
Su debut fue sobresaliente, lleno
de anécdotas y momentos significativos, y dejó un puñado de imágenes para
recordar e instantes cargados de emoción protagonizados por la princesa y sus padres.
Al llegar al desfile compartieron sonrisas y charla. A juzgar por los gestos
señalando al cielo, algún comentario sobre el radiante día de sol que brillaba
en Madrid seguro que surgió. Tras el himno, en el saludo a las autoridades,
puede que por los nervios se le cayó uno de los guantes. Muy pendiente de ella
su padre, que ya en el palco le ayudaba a ajustarse el cinturón.
Luciendo el uniforme de gala del
Ejército de Tierra, la princesa ha tenido un elemento diferenciado en sus
estilismos: el peinado. Llevaba todo el cabello recogido hacia atrás y atado en
un bonito moño trenzado a la altura de la nuca, con acabado totalmente pulido y
reforzado con un par de horquillas discretas. Un elemento diferenciador que le
sienta especialmente bien, pues como detalla una experta en estilismo, “le
aporta definición a las líneas suaves y redondeadas de su rostro, dando como
resultado una imagen más adulta, que transmite fuerza y elegancia”.
Los reyes se mostraron en todo
momento muy orgullosos de la princesa. Padre e hija protagonizaron un tierno
gesto en la tribuna. El rey miraba de reojo a la princesa para comprobar que
realizaba el saludo correspondiente al paso de las distintas unidades. Un gesto
cómplice y emotivo, muy especial. Para tranquilidad del rey, Leonor cumplió a
rajatabla el protocolo, atenta a cada detalle. Cuando sus compañeros de la
Academia de Zaragoza desfilaron frente a ella, no pudo evitar intercambiar una
sonrisa disimulada y una mirada de complicidad.
Al terminar el acto castrense, la
princesa se dirigió con la comitiva al Palacio Real para su primer besamanos,
una ceremonia que requiere mucha paciencia, pues hay que saludar a 2.500
invitados. La heredera provocó una sorpresa generalizada al no cambiarse de
ropa y mantener su uniforme militar. La prensa especializada daba por hecho que
aparcaría el uniforme y elegiría algún vestido de cóctel. Recordemos que este
verano en Mallorca su maleta estuvo marcada por los looks boho chic. Antes de
que comenzaran los saludos, la reina Letizia tuvo un momento cómplice con su
hija, ayudándola a colocarse el uniforme.
Allí volvía a protagonizar un
momento destacado y muy emotivo, al abandonar su posición inicial de espera y
adelantarse junto a su padre para saludar a Miguel Herrero y Rodríguez de
Miñón, uno de los padres de la Constitución, que debido a su avanzada edad iba
a paso lento ayudado por un bastón. La princesa Leonor mantuvo la sonrisa en
todo el besamanos, haciendo que se apreciase su aparato dental.
(Si han conseguido llegar hasta
aquí sin sufrir una subida de azúcar monárquica, les cuento que todos los
párrafos anteriores son un corta y pega de las crónicas que la prensa
generalista hizo este jueves del desfile del 12 de octubre. Les juro que me he
ahorrado la prensa del corazón, solo he tomado periódicos, radios y
televisiones generalistas.
Menudo empacho, ¿verdad?
Todo lleno de
simpatía, naturalidad, gestos cómplices, momentos especiales, espontaneidad,
ternura… Solo les faltó usar la palabra “campechanía”, pero trae malos
recuerdos. Ya ven, la 'operación Leonor' está totalmente lanzada, y en este
octubre, que culminará con su mayoría de edad jurando la Constitución en las
Cortes, nos quieren dejar a la princesa encarrilada en el camino al trono. Ya
podemos gritarle “¡guapa!” cada vez que asista a un acto público, como en su
día se lo gritamos a sus padres, tíos y abuelos, que el “guapos” gritado a los
Borbones es el equivalente en democracia del viejo “Vivan las caenas” que le
gritaban a Fernando VII. Por ahora es la mayoría de la prensa, tan cortesana
como lo ha sido estos cuarenta y tantos años, la que ya le grita “¡guapa!” a la
princesa.)
Mi observación muy particular
Todo el texto es el original con erratas o sin ellas- Una de esas erratas puede
ser CAENAS en vez de cadenas .
No lo sé, después de leer en el diccionario de la lengua española, la acepción
de cadena
4. f. Conjunto de personas que se enlazan una con otra por un motivo
determinado
Me hace pensar que la entrada triunfal en Madrid el 24 de marzo
de 1808 de Fernando VII, aclamado por el pueblo, manifestando su alegría expresando
“caenas” a la continuidad de los borbones.
fuente/enlace
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